Venid a descubrir nuestro sueño: crear un viñedo en una tierra donde el vino se produce desde hace más de mil años.

Os invitamos a nuestra finca, un refugio en el corazón de la Montagnola Senese, un área protegida de extraordinaria belleza donde el tiempo parece detenerse y todavía es posible sentirse libres. Nuestro alojamiento rural se encuentra en la cima de una colina, rodeado de bosques centenarios y atravesado por las famosas “strade bianche” de la Toscana, caminos de grava que serpentean entre viñedos, olivares y antiguas murallas medievales.

Llegar hasta aquí ya forma parte de la experiencia: un viaje a través de paisajes de ensueño, donde cada curva revela una nueva vista digna de un cuadro renacentista. Disponemos de tres apartamentos accesibles por escalera, decorados con gusto y atención al detalle.

Cada apartamento ofrece amplios dormitorios dobles, salón, cocina y baño, pensados para disfrutar del silencio, la intimidad y la serenidad del entorno. Durante vuestra estancia tendréis acceso a la piscina panorámica (abierta de mayo a octubre), bañera de hidromasaje, sauna, así como a nuestros olivares, viñedos y el bosque que nos rodea.

Aquí podréis degustar productos ecológicos que cultivamos con pasión y que la naturaleza nos regala según la temporada. La Montagnola Senese, a 560 m s. n. m. y a solo 25 minutos de Siena, es un mosaico de colinas cubiertas de robles y castaños, ideal para amantes del senderismo, la bicicleta y los paisajes que cuentan historias milenarias. Podréis visitar algunas de las joyas más fascinantes de la Toscana: Siena, Monteriggioni, San Gimignano, Volterra y muchos otros pueblos detenidos en el tiempo. Solo os pedimos que nos ayudéis a preservar este paraíso, depositando los residuos en los contenedores habilitados de la zona.