Ubicada entre los encantadores pueblos de Firgas y Valleseco, esta casa rural bellamente restaurada ofrece una combinación perfecta de encanto tradicional canario y comodidades modernas. Conservando sus paredes de piedra originales y su tejado auténtico, la casa cuenta con tres acogedoras habitaciones, dos con camas dobles y una con dos camas individuales, ideales para familias o grupos de amigos. La cocina totalmente equipada y el acogedor comedor ofrecen un espacio ideal para comer, mientras que el espacioso salón, con chimenea, equipo de música y televisión, garantiza un ambiente relajante.

La propiedad goza de una ubicación ideal cerca de lugares de interés como Firgas, conocido por sus fuentes y tiendas de artesanía, y Valleseco, rodeado de frondosos bosques. Explore el cercano Roque Nublo para disfrutar de impresionantes vistas, la Caldera de Bandama y el encantador pueblo de Tejeda.

En el exterior, disfrute de un jardín de 300 metros cuadrados con terraza, zona de barbacoa y tumbonas, perfecto para relajarse o disfrutar de comidas al aire libre. Esta casa rural es más que un simple alojamiento; es un remanso de paz que combina comodidad, serenidad y naturaleza para una experiencia inolvidable. Con comodidades que incluyen acceso a internet, calefacción, lavadora y servicios incluidos como ropa de cama y toallas, esta casa rural ofrece una escapada cómoda y tranquila en el corazón de las Islas Canarias.