Apartamentos y alquileres en Roquebrune-Cap-Martin

La comuna de Roquebrune-Cap-Martin se encuentra entre Menton y el principado de Mónaco, justo en el punto donde los Alpes franceses se sumergen en el mar. Su pueblo medieval del mismo nombre se alza 300 metros por encima del mar Mediterráneo. Su costa turquesa incluso llegó a enamorar al mismísimo Le Corbusier, arquitecto moderno francés al que se le debe la presencia de maravillosos ejemplares de arquitectura moderna del s. XX en Roquebrune-Cap-Martin. Entre mar, tierra, modernidad y vestigios de la Edad Media, la localidad de Roquebrune logra reconciliar en sí diversas realidades que hacen de esta localidad un rincón especial de la Riviera Francesa.

Planea unas maravillosas vacaciones en la Riviera Francesa con la ayuda de Holidu. Alójate en un moderno apartamento con habitaciones para toda la familia o en un acogedor piso a pocos metros de la playa para que tu escapada romántica sea todo un éxito. Desayuna en la terraza mientras te deleitas con las hermosas vistas al mar Mediterráneo. Haz largas caminatas en las playas de Roquebrune y al llegar recuéstate en el sofá y disfruta de una divertida noche de películas.

El pueblo medieval de Roquebrune-Cap-Martin está lleno de calles empinadas, bóvedas y edificaciones en piedra propias de la Edad Media. Es el hogar de uno de los castillos más antiguos de Europa, así como de lugares de interés como el Fuerte de Cap Martin y la Iglesia de Santa Margarita, de estilo barroco. En contraste a estos edificios de épocas también se alza un Roquebrune-Cap-Martin vanguardista, con Le Cabanon de Le Corbustier y la suntuosa Villa E-1027, grandes obras del arte moderno realizadas por verdaderos visionarios del diseño.

Parte de la Costa Azul se encuentra en la comuna de Roquebrune-Cap-Martin. Disfruta de las deliciosas aguas turquesas del mar Mediterráneo en una playa virgen y tranquila, alejada de todo el bullicio de las urbes y las grandes masas de bañistas. Se dice que la Playa de Buse es una de las más hermosas de toda la Costa. Otras calas en las que puedes darte un gran baño son las playas de Golfe Bleu y la de Rocher.

Es uno de los castillos más antiguos que aún sigue en pie en Francia, construido en el año 970 por orden de Conrado I, conde de Ventimiglia con el fin de proteger la frontera.

Nombrado en honor al arquitecto francés, este sendero se extiende por 11 km desde el pueblo de Roquebrune hasta Mónaco. Parte de este recorrido es dentro de una zona natural protegida, por lo que tendrás la dicha de pasear entre calas de agua cristalina que se mantienen vírgenes.

Una de las mejores de toda la zona. Esta playa se encuentra debajo de las colinas de Roquebrune, en medio del paseo de Le Corbusier y se accede a ella a través de unas escaleras. Disfruta de las aguas cristalinas del mar Mediterráneo en un ambiente tranquilo y silencioso.

El arquitecto francés construyó esta cabaña en Roquebrune-Cap-Martin en 1952 y pasó todos los veranos allí hasta su muerte 13 años después. Este inmueble cuenta solo con una habitación de 10 metros cuadrados, amueblada de forma sencilla y completamente en madera, con un exterior de colores vivos que resalta entre los árboles que le rodean.

Esta villa modernista tiene una historia interesante. Se considera uno de los primeros trabajos grandes de Eileen Gray. Construyó una edificación que pudiera fluir con los elementos que le rodeaban, el sol y el viento de la Bahía de Mónaco. Dio como resultado una estructura con fuerte horizontalidad, pilotes blancos y un aspecto más de barco que de vivienda. El francés Le Corbustier sería luego un visitante recurrente de la casa, incluso llegando a pintar murales dentro que fueron considerados como vandalismo por parte de su dueña.

Es el árbol más antiguo de toda Francia, con más de 2000 años de edad. Se encuentra a unos 300 metros del pueblo de Roquebrune. ¡Imagina toda la historia que tiene este olivo plantado en la Antigüedad! Desde este punto de la ciudad también puedes disfrutar de hermosas vistas al mar.7. Ve a la Playa de Rocher

Cerca de la frontera con Mónaco se encuentra esta playa de gran tranquilidad. Una playa acogedora de apenas 30 metros de ancho, es una gran alternativa para aquellos que deseen evitar las grandes aglomeraciones de las playas de la Costa Azul.