Apartamentos y alquileres vacacionales en Provincia de Gerona

La Provincia de Girona se encuentra en el noreste de Cataluña, y tiene frontera con Barcelona, Lérida y Francia. Además al ser una provincia costera, también limita con el Mar Mediterráneo, y forma parte de la famosísima Costa Brava española. Pero además cuenta con zonas montañosas increíbles al tener frontera con los Pirineos por el norte. No importa dónde elijas tu apartamento en la Provincia de Girona, seguro que disfrutarás.

Cuando te alojas en uno de los alquileres vacacionales en la Provincia de Girona tienes a tu disposición parajes rurales llenos de encanto. Cientos de pueblitos medievales se encuentran desperdigados por todas partes, y en la zona de la costa descubrirás sus paisajes agrestes, vegetación autóctona y sus innumerables calas. Si tienes o alquilas un vehículo, podrás hacer cientos de excursiones interesantes, ¡no hay lugar que no merezca la pena ser visitado!

Tanto si te gustan las playas familiares y turísticas, llenas de ambiente y con todas las comodidades, como las de Portbou, o si prefieres calas tranquilas de aguas cristalinas, como las de Roses o el Cabo de Creus; cuando te alojas en un alquiler vacacional de la Provincia de Girona las tendrás todas a tu disposición. En cualquier caso siempre disfrutarás del Mediterráneo y de unos parajes singulares, ¡no hay duda!

A lo largo y ancho de esta Provincia podrás ser testigo de pueblos conservados desde la Edad Media, pero eso no es todo. Cuando te alojas en un apartamento en la Provincia de Girona, también podrás descubrir las ruinas de Empúries (uno de los yacimientos arqueológicos más importantes), y el Triángulo Daliniano, formado por Figueres, Púbol y Portlligat, donde podrás ver museos sobre su vida y obra.

Este fantástico título se lo ha ganado Besalú. Y seguro que lo has reconocido en series y películas como “Juego de Tronos” o “El Perfume”. Es un auténtico placer recorrer este encantador pueblo del siglo XII.

Si te decantas por la costa, la ciudad más destacada es, sin duda, Cadaqués. Además del encanto que le aportó Dalí, tiene su propio esplendor con sus casitas blancas y sus playas. No te pierdas la Iglesia de Santa María y su mirador.

Este Parque Natural se extiende por once municipios de la Provincia y está repleto de fósiles. Pero además tiene una exuberante vegetación que atrae a amantes de la naturaleza desde todos los rincones del mundo.

Girona, la capital de provincia, es un crisol de culturas que conserva tanto restos romanos, como judíos y árabes. Pasea por su muralla, recorre el casco antiguo, y ve de compras en sus múltiples tiendas. La capital no defrauda a ningún visitante.

Alp es la meca de los deportes de invierno, pero aun fuera de temporada es un lugar precioso que visitar, sobre todo sus dos núcleos poblacionales más importantes, La Masella y La Molina. Recomendamos la visita a la Iglesia Románica de San Pedro del siglo XI.