Villas y chalets en Almonte

El municipio de Almonte se encuentra en la provincia de Huelva y es el tercero más poblado de la región. Parte de su territorio se encuentra dentro del gran Parque Nacional Doñana, un compendio de ecosistemas que ha sido el principal refugio de la biodiversidad de la región desde 1969, albergando en su territorio humedales increíbles y playas paradisíacas donde el sol se refleja en la arena. Entre las arenas doradas de Doñana también se encuentra el pintoresco poblado de El Rocío, conocido por la romería que cada año llena sus calles de feligreses, carrozas y flamenco.

Planea unas maravillosas vacaciones en familia con la ayuda de Holidu. Hospédate en un hermoso chalet rural en medio de las colinas verdes de Almonte, o elige una villa en Matalascañas a orillas de la playa. Date un chapuzón en la piscina mientras disfrutas de un coctel refrescante o juega con los niños en el jardín. Mira los hermosos atardeceres de Andalucía desde tu terraza. Goza de unas vacaciones tranquilas en un acogedor hospedaje lejos del bullicio de las grandes ciudades.

Entre las provincias de Huelva y Sevilla se encuentra el Parque nacional y natural Doñana, un territorio protegido de más de 54.000 hectáreas. Es conocido por su riqueza ecológica y su variedad de biomas. Los humedales, las dunas, las marismas y los pinares del parque albergan una gran cantidad de especies de flora y fauna, entre los que se encuentran ejemplares de águilas imperiales y linces ibéricos, ambas en peligro de extinción. Recorre las dunas, bordea las lagunas llenas de aves y sumérgete en sus playas vírgenes.

La provincia de Huelva se enorgullece de tener algunas de las mejores playas de Andalucía. La playa de Matalascañas es un auténtico paraíso en tierra, con una costa de más de 6 km donde puedes disfrutar del sol y el mar. La playa está equipada con todos los servicios que un bañista puede necesitar, así como con diversidad de hoteles y restaurantes donde parar a por un bocadillo. Alejándose de la urbe de Matalascañas se puede encontrar la costa salvaje del Parque Nacional de Doñana, con maravillosas playas vírgenes de arena dorada como la Playa de Pico de Loro y la playa de Cuesta Maneli.

El templo fue construido en 1969 siguiendo el diseño de Antonio Delgado y Roig y Alberto Balbotín de Orta. El edificio es un ejemplar de las construcciones labriegas de antaño que solían colmar las zonas rurales de Andalucía, de paredes blancas y techos de teja árabe.

Marismas, dunas y playas son algunos de los variados ecosistemas que coexisten en este parque. Es una reserva muy importante que sirve de refugio para una gran diversidad de especies silvestres. Conoce sus dunas móviles o paséate por uno de sus lagos y avista a alguna de las más de 200 especies de aves que habitan por allí.

Una playa de arena fina que cuenta con 5 kilómetros de costa dorada y aguas transparentes. Puedes acceder a ella a través de su tramo urbano que está pegado a la urbanización de Matalascañas, y si deseas experimentar una playa más virgen, prueba con caminar por la costa acercándote hacia el parque de Doñana.

Una iglesia parroquial con mucho encanto que mezcla en su arquitectura diversos estilos. Alberga en su interior una capilla de estilo mudéjar, es uno de los pocos elementos que quedan del templo original, ya que en el s. XVII fue remodelada, dándole un estilo mucho más barroco.

Esta casa palacio solía ser una residencia privada, pero luego fue convertida en un centro de visitantes del Parque Doñana, donde se puede obtener más información acerca de la región y sus costumbres. Anímate a descubrir por ti mismo las peculiaridades de este sitio, como las escaleras de mármol rojo o las iniciales del dueño oficial que están grabadas en una de las paredes.

Se encuentra dentro del Parque Nacional Doñana y es una playa salvaje. Su arena es dorada y lisa, sin piedras, por lo que su costa es maravillosa para caminatas al atardecer. Esta playa no prohíbe la entrada de mascotas, por lo que puedes traer a tu compañero para un día de sol y mar sin ningún problema.

¿Deseas probar auténtica comida onubense en un tranquilo ambiente familiar? El Mesón Tamborilero abrió sus puertas en el año 1971 en un antiguo lagar y desde entonces ha sido proveedor de deliciosos platos tradicionales en Almonte. No hay carta, sino que el comensal entra a la cocina y escoge lo que desea comer de entre las opciones dadas por el chef, una manera maravillosa de adentrarse en la gastronomía local.