Villas y chalets en Cartaya

Los chalets y villas vacacionales de Cartaya son una fantástica opción de alojamiento para viajeros que estén buscando una relajada zona de playa en la costa de Huelva para pasar sus vacaciones de verano. En Holidu encontrarás una gran variedad de ellas, situadas muy cerca de las playas de El Rompido y El Portil. Pero además, próximos a los campos de golf de Nuevo Portil y El Rompido, a los parajes de las Marismas del Río Piedras y de las Marismas del Odiel. Todo lo que necesitas para disfrutar de unas vacaciones muy completas. ¡No esperes más para reservar tu chalet en Cartaya!

Aunque es posible encontrar algunos chalets adosados en Cartaya que forman parte de complejos residenciales con zonas ajardinadas y piscina, son más habituales las villas independientes con jardín y piscina privada, donde podrás relajarte sin que nadie te moleste. Casi siempre con capacidad para 8 y 10 personas, por lo que son perfectas para familias muy numerosas o grupos de amigos. Y si tienes pensado traer con vosotros a tu perro, no te preocupes. Hay muchas villas en Cartaya que permiten mascotas.

Cartaya es un destino ideal para disfrutar de hermosas playas, ya sea para bañarse o practicar actividades acuáticas, dar paseos en barco o disfrutar de jornadas de pesca. En este lugar, la costa ha conformado lo que se conoce como La Flecha, una preciosa playa virgen rodeada de los hermosos parajes de las Marismas del Río Piedras y Flecha de El Rompido. Pero además, las playas de Nuevo Portil y San Miguel ofrecen uno de los miradores más bellos de toda la Costa de la Luz. ¡Reserva un chalet en Cartaya cerca de la playa y ven a disfrutar de ellas todo lo que quieras!

Si eres aficionado al golf, no dudes en reservar una villa turística en Cartaya para tus próximas vacaciones. Y es que la zona cuenta con dos magníficos clubes para disfrutar de una emocionante experiencia de juego mientras te deleitas con las vistas del entorno natural, entre las marismas y el Océano Atlántico. El Club de Golf Nuevo Portil y el Club de Golf El Rompido, ambos de 18 hoyos.

Construid en el siglo XV para proteger y vigilar los señoríos cercanos, el Castillo de los Zúñiga es el monumento más representativo de Cartaya. Una majestuosa fortaleza que todavía conserva en muy buenas condiciones su maravilloso patio de armas y sus imponentes murallas de 8 metros de altura.

Cerca del Río Piedras y de la Flecha de El Rompido encontramos un precioso faro de mediados del siglo XIX que cuenta con 13 metros de altura y cuyo radio de iluminación alcanza las 16 millas. Ya no se encuentra en funcionamiento, pero merece la pena visitarlo para poder disfrutar de las maravillosas vistas del pueblo, la Flecha de El Rompido y el Paraje Natural del Río Piedras.

El Paraje Natural Marismas del Río Piedras y Flecha del Rompido es uno de los más grandes e importantes de la provincia de Huelva debido su gran valor ambiental y ornitológico. De visita obligada para los aficionados a la observación de aves por ser un punto de paso de gran relevancia en las rutas migratorias entre África y Europa.

Situado a orillas del Río Piedras, estos molinos de estilo mudéjar son una obra de carácter industrial que fue construida en el siglo XIX. En la época jugaron un importante papel en el desarrollo de la localidad. De los tres que había, hoy podemos ver el de Legrete, declarado Bien de Interés Cultural.

Dentro del sistema de circuitos verdes de Cartaya se encuentra el Mirador de San Miguel, desde el que pueden observarse los cordones dunares y la ría, una postal que es todavía más hermosa al atardecer. Además, muy cerca se encuentran el mirador de la Barraca y el del Pantano.

Si viajas en familia, uno de los mejores planes que podéis hacer en Cartaya es pasar un día en el parque acuático. Un divertido complejo con numerosas atracciones, tanto para los adultos como para los más pequeños, desde grandes piscinas a toboganes. Pero además, dispone de restaurantes, bares y tiendas de artículos de baño.

Otro de los grandes atractivos de Cartaya es su exquisita gastronomía, que hace las delicias incluso de los paladares más exigentes. El pescaíto frito, el marisco, las gambas y el jamón son sólo algunas de las delicias que no puedes dejar de probar. Pero también son deliciosas las navajas, los carabineros y las coquinas.