Casas rurales en Navarra

Navarra para los amantes de la naturaleza

Esta es la única región de todo el continente europeo que posee paisajes alpinos, atlánticos y mediterráneos. Desde las nevadas cumbres de los Pirineos hasta las desérticas llanuras de las Bardenas Reales . Es una región con una impresionante riqueza natural que se conserva actualmente. Ofrece en sus espacios al aire libre, como sus espectaculares gargantas, pintorescos bosques, sorprendentes lagos y embalses, cuevas llenas de misterio y numerosos espacios protegidos. Y para descubrirlo, sólo tienes que alquilar una de las casas rurales con piscina en Navarra para tus próximas vacaciones.

Navarra para los amantes de la cultura

Navarra ofrece amplia oferta cultural y natural. En Pamplona, podrás recorrer su casco histórico, conociendo zonas pintorescas como la Catedral de Santa María la Real y el Museo de Navarra. Luego puedes descubrir los monasterios de Leyre y La Oliva, emblemas del arte románico y gótico. Y por último en Olite disfrutarás de explorar el castillo medieval. Si deseas continuar con una experiencia cultural, otros destinos atractivos son las casas rurales en Cantabria o las casas rurales en La Rioja

1. Enamórate de la Selva de Irati
2. Da un paseo por Ochagavía
3. Contempla el vuelo de las aves en el Foz de Lumbier
4. Siéntete pequeño en el Foz de Arbayún
5. Haz una ruta por el Parque Natural de Bardenas Reales
6. Viaja a la Edad Media visitando Olite
7. Contempla las impresionantes vistas del monasterio de Leyre

1. Enamórate de la Selva de Irati

Los paisajes más frondosos en un viaje por las casas rurales en la montaña en Navarra se encuentran en los Pirineos, concretamente en la Selva de Irati, situada entre los valles de Salazar y Aezkoa. Es el segundo hayedo más grande de Europa, albergando nada menos que tres reservas naturales. ¡Un auténtico paraíso para los amantes del senderismo!

2. Da un paseo por Ochagavía

Ochagavía está considerado el pueblo más bonito, un lugar imprescindible para los aficionados a la fotografía por sus cientos de rincones mágicos. Paseando por el pueblo, podrás admirar sus típicas viviendas de piedra con tejados de pizarra, algunas de ellas con fachadas blasonadas. Si quieres disfrutar de un entorno similar, te recomendamos un fin de semana en los hostales en Toledo.

3. Contempla el vuelo de las aves en el Foz de Lumbier

El Foz de Lumbier es un profundo desfiladero que podrás descubrir siguiendo la senda del antiguo ferrocarril de Irati. Un lugar ideal para los amantes del senderismo y para los aficionados a la ornitología, ya que en él es posible contemplar el vuelo de halcones, alimoches y buitres.

4. Siéntete pequeño en el Foz de Arbayún

Con 6 km de longitud y 300 metros de altura, el Foz de Arbayún es el desfiladero más largo de la región. Un impresionante cañón natural que el río Salazar ha ido labrando a lo largo de miles de años. ¡Una manera diferente de conocerlo es en un paseo a caballo!

5. Haz una ruta por el Parque Natural de Bardenas Reales

Un espacio semidesértico que contrasta con el verdor y la frondosidad de los parajes de los Pirineos, donde el viajero se sentirá transportado a los paisajes de Arizona. Para visitarlo, deberás seguir las pistas de tierra, realizando un recorrido circular que te llevará de nuevo al punto de partida.

6. Viaja a la Edad Media visitando Olite

Olite es un verdadero sueño para los amantes de la Edad Media. Por muchas fotos que hayas visto antes, nada puede compararse a visitarlo en persona, especialmente su imponente castillo. Un majestuoso palacio almenado construido por el rey Carlos III. Pero además, el simple hecho de pasear por su maravilloso casco histórico es un auténtico placer.

7. Contempla las impresionantes vistas del monasterio de Leyre

El monasterio de Leyre parece salido del lienzo de un pintor. Asentado sobre la falda de Leyre, el edificio goza de un enclave privilegiado, con unas vistas que nunca te cansarías de mirar. El curso del río Aragón fluye represado gracias al encantador embalse de Yesa.