Casas rurales en Carnota

Las casas rurales de Carnota son ideales para pasar unos días disfrutando del sol y del mar en julio o agosto, sobre todo para aquellos que quieran huir de las masificadas playas de otras zonas de la costa española. Una zona que te permitirá disfrutar del mar y de la naturaleza al mismo tiempo. Y es que la mayoría de los alquileres están ubicados entre preciosos paisajes tapizados de verde, pero a pocos minutos de la playa. ¿A qué esperas para reservar tu casa rural en Carnota?

Las casas rurales para 2, 4, 6 y 8 personas son la tipología de alojamiento más habitual en Carnota. Con lo cual, tanto si viajas en pareja como si lo haces en familia o con un grupo de amigos, siempre encontrarás el alquiler perfecto para vosotros. Casi todas ellas son antiguas construcciones de piedra, perfectamente rehabilitadas y acondicionadas con todo tipo de comodidades para que disfrutes de una maravillosa estancia junto a los tuyos. Con interiores revestidos en piedra y madera y decoradas con estilo rústico, lo que las hace muy acogedoras. Además, la mayoría disponen de amplios jardines con césped o amplios patios donde disfrutar del buen tiempo. ¿Se te ocurre algo mejor que una casa rural en Carnota para tus próximas vacaciones?

Considerada como una de las playas más hermosas de España, con sus 7 km de longitud, la playa de Carnota es la más extensa de toda Galicia, destacando por su finísima arena blanca y sus aguas cristalinas que nada tienen que envidiar a las del Caribe. Y lo mejor de todo es que, debido a su enorme extensión, apenas hay gente, lo que te permitirá disfrutar de ella sin agobios y dar agradables paseos al atardecer. ¡Reserva una casa rural en Carnota cerca de la playa y ven a tomar el sol todo el tiempo que se te antoje!

Si estás buscando un destino para huir del estresante ritmo de la vida urbana y perderte en un bellísimo y tranquilo paisaje, no dudes en reservar una casa rural en Carnota para tus próximas vacaciones. Su playa virgen, sus paisajes verdes, su exquisita gastronomía tradicional y su amplia oferta de actividades acuáticas son sólo algunos de los ingredientes que convierten a este lugar en un maravilloso destino para desconectar y relajarse.

La desembocadura del río Valdebois, que forma parte de la playa de Carnota forma una singular playa de unos 300 metros de extensión conocida como Boca do Río, ideal para que los más pequeños se bañen con seguridad. Cuando la marea baja, es posible apreciar con claridad las pintorescas formaciones rocosas que la han convertido en una de las playas más fotografiadas de Galicia.

Erigido en la segunda mitad del siglo XVIII, con sus 34,74 metros, el hórreo de Carnota es uno de los más largos de toda Galicia. Además, muy cerca pueden verse un Palomar y la iglesia de Santa Comba, un precioso templo barroco del siglo XVIII. Los tres conforman un conjunto arquitectónico de gran interés.

Sobre la cima del Pico de Peñafiel se encuentran los restos del antiguo Castillo de Peñafiel. Un pequeño torreón ubicado sobre la desembocadura del río Xallas que quedó completamente en ruinas durante las Revoltas Irmandiñas del siglo XV. Hay visitas guiadas por la zona para conocer más sobre la historia de la ciudad

Carnota fue fundada en el siglo XVII, pero existen diversos castros y túmulos que atestiguan que la zona estaba ya poblada en la Antigüedad, al menos desde la época celta. Entre los restos de la época destacan los del Castro de Mallou, un poblado fortificado de la Edad de Hierro que permaneció habitado entre los siglos IV a. C y I d. C.

El Monte Pindo mide 627 metros y, desde la época de los celtas, ha tenido un sentido sagrado. Hay diversos recorridos bien señalizados que permiten recorrer sus legendarios paisajes, siendo la Ruta de A Moa una de las más recomendables. Un itinerario circular de unos 9 km que se inicia en la aldea de O Fieiro.

Aunque no es un lugar muy frecuentado por los lugareños, vale la pena acercarse para disfrutar de un atardecer inolvidable desde lo alto de la infinita playa de Carnota y apreciar claramente su silueta de media luna. Además, en la zona hay merenderos para organizar un picnic mientras disfrutas de las vistas.

Aunque forma parte del Concello de Dumbría, no podemos dejar de mencionarla por su proximidad con Carnota y por su importancia turística. Y es que la Fervenza do Ézaro es uno de los saltos de agua más famosos y visitados de toda Galicia. Una impresionante cascada de más de 100 metros de altura que se precipita hacia el Xallas, el único río de Europa que desemboca en el mar en forma de cascada.