Casas rurales en los Pirineos

Los Pirineos son un auténtico paraíso para los amantes de la naturaleza. Cada piedra, cada huella, cada árbol, cada gota es un elemento en perfecta armonía en un riquísimo y sorprendente ecosistema natural. Sus impresionantes parajes naturales, sus pintorescos pueblos y su amplia oferta de deportes de aventura lo convierten un lugar único y de belleza incomparable. Los Pirineos franceses son perfectos para aficionados al senderismo; los Pirineos Catalanes para perderse entre lagos e ibones; los Pirineos Aragoneses para los amantes de los deportes de invierno y los que buscan pueblos con encanto; y el Pirineo de Navarra para los que buscan naturaleza pura y variedad natural y cultural. ¡No esperes más para reservar tu casa rural en los Pirineos y venir a descubrirlos!

Las estaciones de esquí de los Pirineos son imprescindibles para los amantes de las emociones en invierno. Con infraestructuras de primer orden y pistas de gran calidad para disfrutar del esquí, pero también para otras modalidades deportivas y actividades de ocio, como raquetas de nieve, buceo en hielo o paseos en trineos tirados por perros. Panticosa, Candanchú, Formigal, Astún y Cerler son solo algunas de las estaciones que han dado fama mundial a esta región y que ofrecen diversión para todas las edades. ¡Reserva una casa rural en los Pirineos cerca de las pistas de esquí y ven a disfrutar de la nieve todo el tiempo que se te antoje!

Jaca es uno de los pueblos más bonitos de España. Su cuidada arquitectura y su atmósfera tranquila la convierten en un lugar ideal para una escapada de fin de semana alejado de la rutina a pocos kilómetros del esplendor de los Pirineos. Con una amplia variedad de edificios y monumentos de gran valor arquitectónico.

En Tramacastilla de Tena podrás construir tu propio iglú y pasar la noche en él. Toda una aventura para disfrutar en familia que os dejará recuerdos inolvidables. Si contratas la actividad, no tendrás que preocuparte por nada, ya que recibirás todo el equipamiento para que vivas una experiencia de primer nivel.

Esta parte de los Pirineos destaca por su pureza y por su gran variedad natural y cultural. Con joyas naturales como la Selva de Irati, Sorogain, las foces de Lumbier, el Valle de Belagua, el Valle del Roncal, el Valle de Salazar y la sierra de Leyre. Zonas que merecen un recorrido para disfrutar del paisaje y de la tranquilidad de sus pueblos.

Completamente integrado en la piedra, el Monasterio de San Juan de la Peña es una visita imprescindible para cualquier viajero que decida pasar unos días en los Pirineos Aragoneses. Una auténtica joya de época medieval con numerosos elementos de estilo románico, rodeada de un paisaje que quita el sentido.

A su paso por Aragón, los Pirineos recrean paisajes de naturaleza silvestre, salpicados por pueblos llenos de historia. Uno de ellos es el Parque Natural de Ordesa y Monte Perdido, que puede disfrutarse tanto en verano como en invierno. Aunque la mejor época para hacerlo es el otoño, cuando sus extensos valles se tiñen de colores.

El Parque Nacional de Aigüestortes y Sant Maurici es, sin duda, uno de los principales reclamos de los Pirineos Catalanes. El lugar ideal para caminar en alta montaña y perderse entre bellos lagos e ibones. Además, la gastronomía de esta zona es un motivo más para elegirlo como destino en una escapada de fin de semana.

Situado en el Pirineo Francés, Saint-Lary-Soulan es el principal centro de concentración de actividades como el rafting, hydrospeed o descenso de cañones. Pero además, toda la zona en general ofrece el escenario perfecto para disfrutar de cientos de kilómetro s de senderos perfectamente señalizados para sumergirse de lleno en la naturaleza.