Escapada fin de semana a los Pirineos

¿Por qué hacer una escapada de fin de semana a los Pirineos?

Este destino es perfecto para los amantes de la naturaleza. Es un viaje apto para todos los públicos y a los niños les encantará. Puedes visitar el Valle de Aguas Tuertas, situado en el Parque Natural de los Valles Occidentales, un lugar de una belleza espectacular y bien señalizado. También el Cañón de Añisclo y la Mesa de los Tres Reyes son otras rutas de interés. Y, si te gustan los deportes de aventuras, siempre puedes hacer una escapada a los Pirineos para practicar ciclismo, esquí o rafting.

Además, sus hermosos pueblos te esperan. El de Panticosa es conocido por su antiguo balneario, el de Aínsa tiene un castillo con su Torre del Homenaje del siglo XI, el de Torla-Ordesa está considerado uno de los más bellos de España… y todos ellos en un entorno único. Por último, la estación de esquí de Baqueira Beret es otro importante punto de interés, tiene unos 130 km de pistas y es un lugar idóneo para iniciarse en el esquí, tanto para niños como para adultos.

¿Qué actividades puedes hacer en los Pirineos durante un fin de semana?

Caminar por el Valle de Benasque es una experiencia inolvidable. Se encuentra en el Pirineo aragonés y en él podemos ver paisajes de gran belleza y picos tan altos como el Aneto o el Perdiguero. Aquí se puede practicar barranquismo, escalada, piragüismo o equitación. Los pueblos de Vall de Bohí, en el Pirineo catalán, son otro sorprendente lugar que no te debes perder. Además, este lugar forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Si viajas con niños, les encantará el Parque Natural de los Valles Occidentales, donde se pueden ver caballos, osos, nutrias y quebrantahuesos. Y en el Parque Nacional de Aigüestortes, podrás ver los ríos Noguera Pallaresa y Noguera Ribagorzana, así como preciosas cascadas y una rica flora. Besalú es un lugar mágico, una pequeña villa de aspecto medieval que destaca por su puente medieval. Por último, y sólo apto para valientes, si quieres sentir pura adrenalina, tienes que probar el columpio extremo del Valle de Tena, toda una experiencia, pues es de 150 m de caída libre. Eso sí, las vistas son espectaculares, al estar sobre un acantilado.