Escapada de fin de semana a La Rioja

Escapada de fin de semana a La Rioja

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Vive una escapada de fin de semana en La Rioja y conoce el norte de España

¿Te hace falta un paréntesis en medio del ajetreo de la vida diaria? Pues no hablemos más; visita La Rioja, una región en la cual la fragancia del vino impregna el aire que se respira, los pueblos parecen estar suspendidos en el tiempo y cada atardecer tiñe al cielo de un dorado suave que te enamorará. Así es La Rioja, ni más ni menos; esa zona del norte de España que te invita a tomar una pausa y deleitarte con aspectos sencillos de la vida. En un único fin de semana, que se te puede hacer muy corto, tendrás la oportunidad de perderte entre viñedos que se extienden hasta donde el horizonte, recorrer bodegas que han cuidado y trabajado sus vinos generaciones y generaciones, o pasear por calles hermosas llenas de adoquines que te cuentan la historia viva de sus pueblos. Es un territorio pequeño, sí, pero está repleto de calma, sabores y vida, es un escenario ideal para reconectar contigo mismo y permitir que el tiempo, por fin, transcurra sin preocpaciones. ¿Lo quieres comprobar? Holidu te ayuda a ello.

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Vive La Rioja en un fin de semana inolvidable

¿Por qué elegir un alojamiento rural en La Rioja?

Elegir una de las amplias y coquetas casas rurales en La Rioja significa adentrarse completamente en la autenticidad más pura de esta región tranquila y de carácter vinícola del norte de España. Son esos pequeños placeres, como el hecho de despertarte con el canto de los gallos en una casa de piedra rodeada por viñedos, la posibilidad de desayunar en tu propia cocina con productos locales o, simplemente, sentarte al atardecer en el patio a degustar una copa de Rioja mientras observas cómo las cepas se tiñen de oro… los que transforman un simple viaje en una experiencia vacacional inolvidable. Aquí, a diferencia de los alquileres vacacionales en Madrid, donde todo avanza rápidamente, el tiempo se siente más largo e invita a que tú te establezcas tu propio ritmo, a que explores sin prisa las rutas rurales que existen, que son preciosas, y a que encuentres esos sitios que no aparecen en las guías pero que al final resultan ser lo más entrañable y divertido del viaje.

¿Qué actividades se pueden realizar durante una escapada de fin de semana a La Rioja?

A pesar de que un fin de semana se antoja poco tiempo con todo lo que hay por ver, La Rioja te puede ofrecer un cúmulo de experiencias que garantizan que cada segundo que emplees sea valioso. Puedes, por ejemplo, dedicar una mañana a visitar el asombroso Monasterio de Yuso, en San Millán de la Cogolla, lugar de nacimiento del castellano, y luego, por la tarde, ir a pasear por algunas de las bodegas más representativas de Haro, donde el vino no es solo un producto, es casi una religión. ¿Eres de los que viaja buscando sentir la historia en las piedras y que el arte te hable? Entonces, pisar los monasterios de Yuso y Suso es como viajar en el tiempo. No son solo edificios; cada rincón, cada piedra, guarda el eco de siglos enteros, y solo con quedarte un momento en silencio, parece que te susurran sus secretos. Pero si lo tuyo de verdad es perder la mirada en un horizonte infinito, prepárate para que se te escape un "¡guau!" en los miradores de la Sonsierra riojana. Te lo digo en serio, es de esos paisajes que no parecen reales, como si alguien hubiera pintado a mano cada montaña y cada viñedo en un lienzo gigante.Y bueno, si el reloj no te apremia, ¿por qué no alargar un poco la magia? Aventúrate un poco más al norte en las casas rurales en Asturias o incluso las casas rurales en Navarra. Pero la verdad es que, si solo tienes un fin de semana, La Rioja por sí sola es un mundo. Para que no se te pase nada, tienes a tu disposición la web oficial de turismo de La Rioja, que se puede convertir en tu mejor compañera de viaje.

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Preguntas frecuentes: Escapada en La Rioja

¿Cuál es la mejor época para visitar La Rioja?

Cuando la tierra está en su momento más hermoso es el mejor momento para visitar la Rioja; es decir, en la primavera y el otoño. Entre abril y junio los viñedos son una manta de un verde intenso y el clima es tan agradable que da pena dejar de caminar. Luego, en septiembre y octubre llega la vendimia. Los campos amanecen llenos de vida y el aire huele a uva pisada, a festejo, a tradición. Son épocas ideales porque te libras del calorazo del verano y del frío del invierno; así que da igual si quieres pasar el día entero fuera o refugiarte en una bodega con encanto.

¿Hace falta el coche para moverte por La Rioja?

Resulta prácticamente imprescindible si pretendes exprimir al máximo tu escapada de fin de semana a La Rioja. Aunque Logroño y algunas localidades principales cuentan con servicios de transporte, la verdadera magia de la región se esconde en esos caminos rurales que serpentean entre viñedos, en las bodegas familiares alejadas de las rutas principales y en los pueblos con encanto que salpican la geografía riojana. La gracia de ir en tu propio coche es precisamente esa: la libertad total. Que veas un caminito que se adentra entre los viñedos y puedas decir "¿y si nos metemos por ahí a lo loco a ver qué encontramos?". Esas son las mejores aventuras, las que no vienen en ninguna guía. Te permite montarte un plan a tu medida, lejos de los circuitos de siempre.

¿Qué no debo perderme en una visita breve?

Con tan solo un fin de semana, te convendría centrarte en tres experiencias que capten perfectamente la esencia riojana. Para empezar, ni lo dudes: métete en una bodega de las de verdad, a ser posible por la zona de Haro, la mejor zona de todas. No es solo probar vino, es entender por fin esa conexión tan especial que tiene esta tierra con sus "caldos". Es donde de verdad empezarás a pillarle el gusto a todo esto. Segundo, un paseo por el casco antiguo de Logroño, recorriendo el Laurel y el San Juan para tapear como un auténtico riojano. Y la tercera, y no por ello menos memorable, es acercarte al Monasterio de Yuso, ubicado en San Millán de la Cogolla. No es solo otro monumento; es uno de esos sitios únicos donde de verdad sientes que las piedras hablan por sí mismas. Se respira historia de La Rioja por los cuatro costados.

¿Y para dormir en La Rioja? ¿Hay sitios con encanto?

La Rioja goza de muchas opciones para esto. Sí, hay hoteles normales, pero lo bonito está en otra parte: en esas casas rurales con historia que han rescatado viejas bodegas o casonas de piedra, muchas literalmente metidas entre viñedos. También hay monasterios que han abierto sus puertas para huéspedes y posadas de gestión familiar donde te tratan como si fueras de la casa. Eso sí, un consejo de amigo: si vas en temporada alta (vendimia o algún puente gastronómico), no dejes la reserva para el último momento. Con Holidu, los sitios con más magia… ¡desaparecen!

¿Qué hay que comer sí o sí

Comer en La Rioja no es solo alimentarse, es casi como si fuera una ceremonia. La cocina riojana tiene ese don mágico de seleccionar los platos más humildes, de toda la vida, y convertirlos en una auténtica obra de arte. Es la tradición hecha sabor. Las patatas a la riojana, con su chorizo y su punto de picante, son el plato más universal y sabroso, pero no te quedes solo ahí. La menestra de verduras, que cambia con cada estación, demuestra la calidad de la huerta local. El cordero asado o en chilindrón es otra joya, al igual que los pimientos rellenos de carnes selectas. Y cómo no, los caprichos de caza que aparecen en temporada. Todo, por supuesto, regado con los vinos de la tierra, desde un joven cosechero hasta un reserva con carácter, porque aquí el maridaje es casi una obligación moral.