Cómo conseguir la licencia turística en Cataluña

A lo largo de este proceso te acompañaremos con un enfoque práctico y accesible, explicando cada fase con precisión y adaptando la información tanto a quienes inician este trámite por primera vez como a gestores con experiencia que buscan resolver dudas específicas. 

Hablaremos de los documentos que necesitas reunir, de cómo presentarlos —ya sea desde el salón de tu casa por vía telemática o acercándote personalmente a las ventanillas municipales—. Y, por supuesto, qué puedes esperar una vez que ya tengas en tus manos ese número de registro. 

Primer paso: ¿puedo obtener una licencia HUT?

Antes de ilusionarte con el proyecto y de empezar a reunir papeles, es fundamental que te cerciores de que en tu localidad se puede obtener una licencia HUT. Ante todo, has de saber que en varias ciudades catalanas como Barcelona, Tarragona o Badalona han decidido suspender temporalmente la emisión de nuevos permisos. Así que, por ahora, cualquier solicitud en estas ciudades quedaría en un limbo administrativo. De ahí que el primer paso fundamental sea contactar al ayuntamiento en cuestión (vía telefónica o por email) para confirmar que no existen restricciones que trunquen la solicitud.

Paso dos: reunir documentos y otros requisitos legales

La solicitud de una licencia HUT puede resultar un poco tediosa, pero, en el fondo, te permitirá dormir con tranquilidad sabiendo que cumples con lo que estipula la ley. Se trata de reunir con calma esos papeles que demuestran que tu vivienda está preparada para la actividad económica del alquiler vacacional. Ante todo, necesitarás un certificado de habitabilidad, ese documento que asegura que tu hogar es un espacio apto para vivir en él. 

Asimismo, tendrás que presentar la escritura de la propiedad o un documento que acredite que tú eres el dueño o dueña del inmueble en cuestión. A ella has de sumar un certificado de eficiencia energética, que hoy en día es casi como la carta de presentación de una casa de calidad. Y por último, un seguro de responsabilidad civil, por si la suerte te juega una mala pasada. Y ojo con esto último, porque en muchos pueblos y ciudades te van a pedir también el visto bueno de tu comunidad de vecinos. Concretamente, hablamos de los dos tercios de la comunidad, un trámite que conviene no dejar para el final pues tienen derecho a impedir tu actividad. 

Pero no se trata únicamente de cumplir con la documentación y los trámites administrativos. La vivienda debe ser, en sí misma, acogedora y funcional. Esto es, con mobiliario cómodo y todos los elementos necesarios para que el huésped se sienta en su hogar desde el primer momento. Agua caliente y fría, iluminación adecuada, electrodomésticos intuitivos, conexión a Internet… lo esencial e imprescindible. 

Asimismo, es fundamental facilitar un número de contacto disponible las 24 horas para atender cualquier incidencia, un gesto que transmite seguridad y confianza. Del mismo modo, facilitar un libro de reclamaciones no debe entenderse como un mero requisito legal, sino como una herramienta para escuchar a los huéspedes y mejorar continuamente el servicio.

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Paso tres: presentar la Declaración Responsable en el ayuntamiento

¿Qué es exactamente la Declaración Responsable? Se trata de tu compromiso formal por escrito, una declaración solemne en la que afirmas, bajo tu responsabilidad, que tu vivienda cumple con todos los requisitos legales para operar como alojamiento turístico. No constituye un permiso en sí mismo, sino el trámite inicial que pone en marcha la solicitud de la licencia HUT.

Si deseas obtener una visión general del proceso, siempre puedes consultar la guía oficial en el portal Canal Empresa de la Generalitat. Algunas ciudades, como Girona, han simplificado mucho las cosas y permiten presentar la declaración en línea a través de su sede electrónica, sin necesidad de pedir cita previa, lo que agiliza notablemente el proceso. 

Sin embargo, en la mayoría de municipios la realidad es bien diferente. Lo más probable es que tengas que solicitar cita previa, ya sea por internet o por teléfono, para acudir personalmente al departamento de Urbanismo del ayuntamiento en cuestión y entregar toda la documentación personalmente. Este es el caso, por ejemplo, de Barcelona y Tarragona, donde, en estos momentos, la emisión de nuevas licencias está paralizada.

Así que, por ahora, no es posible ni siquiera reservar cita. En resumen, la clave para registrar un alquiler vacacional en Cataluña está en no dar nada por sentado y consultar directamente en el ayuntamiento al que pertenezca el inmueble cuál es el procedimiento vigente a seguir.

Paso cuatro: mostrar en todo momento la licencia HUT

Una vez que tanto la Generalitat como tu ayuntamiento han dado el visto bueno a toda la documentación, tu vivienda queda oficialmente inscrita en el Registro de Turismo de Cataluña. Será entonces cuando recibas la licencia HUT, que actúa como tu DNI turístico. Se trata de una combinación de letras y números; por ejemplo, HUTG-001234, si tu propiedad está en Girona. Ese código certifica que operas de manera legal y deberás incorporarlo en todos los anuncios que tengas en las plataformas de alquiler vacacional y en los contratos que firmes con los huéspedes.

Paso cinco: solicitar un Número de Registro de Alquiler (NRA)

Desde que recibes tu licencia HUT, ese código que te identifica dentro del registro turístico de Cataluña, puedes respirar tranquilo sabiendo que cumples con la normativa autonómica. Sin embargo, para estar completamente al día y poder anunciar tu propiedad con todas las de la ley, es importante que cumplas con un nuevo requisito nacional que entró en vigor en julio de 2025: la obtención del Número de Registro de Alquiler (NRA).

Esto significa que el HUT autonómico por sí solo ya no será suficiente para operar con plena legalidad. Tendrás que contar con ambos identificadores —el autonómico y el nacional— para que tu anuncio respete las exigencias legales. 

Si bien el proceso para conseguir el NRA tiene sus particularidades, la buena noticia es que puedes iniciarlo cómodamente desde casa a través de la Sede Electrónica de los Registradores. Y si surge cualquier duda o quieres profundizar en los pasos concretos a seguir, siempre puedes consultar nuestra guía práctica donde respondemos a las preguntas más habituales sobre este trámite.

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